La
eficiencia energética y sus enormes posibilidades en los procesos industriales
no son fáciles de cuantificar y evaluar. Existen actuaciones que se amortizan
muy rápidamente y otras que requieren un periodo de tiempo prolongado. Veamos
en esta ocasión una aplicación de rápida amortización en hornos de proceso. Los
datos que proporcionamos son como siempre objetivos y también mencionamos que
proceden de estudios en los que los costes de la energía son mucho más bajos
que los actuales, especialmente en Europa.
Los
disolventes inflamables usados en los procesos de producción industrial
típicamente se evaporan en los hornos industriales. Las temperaturas de los
hornos más altas evaporan los vapores de los disolventes más rápidamente,
permitiendo una producción más rápida. Debido a que los vapores son
inflamables, el aire de escape se descarga (junto con el calor) para prevenir
la acumulación de los vapores en el horno. Cuando las temperaturas de los
hornos se incrementan, las plantas tienen que mantener ratios de ventilación
más altos para reducir los niveles de concentración de vapor del disolvente y
mantener el LFL respectivo.
Por ejemplo,
los ratios de seguridad de ventilación de NFPA para hornos cargados por lotes
operando por debajo de 250 ºF es 10:1 y xilol tiene un LFL de un 1 %. Por lo tanto, es necesario añadir una ventilación
de escape al vapor hasta que la concentración del disolvente alcanza 0,1 %, lo
cual significa que la planta tiene en el escape 10 veces la cantidad de aire
requerida por el proceso para cumplir el requerimiento NFPA. Si el proceso
opera por encima de 250 ºF, el ratio de seguridad se eleva a 14:1, el LFL baja
a 0,07 %, y la planta tiene 14 veces la cantidad de aire requerida para
mantener el proceso inflamado.
La tasa no
uniforme de vaporización del disolvente es una de las razones por las que LFLs
son tan exigentes. La vaporización del disolvente es inherentemente no uniforme
principalmente por las pérdidas de la pared y las características de carga,
esto causa concentraciones periódicamente altas en el horno durante el proceso
de vaporización. Como resultado, los ratios de ventilación se calculan usando
las necesidades pico teóricas de ventilación basadas en las altas
concentraciones de vapor que pueden acumularse durante los procesos de
vaporización.
Equipos de monitoreo LFL
El equipo de
monitoreo LFL puede reducir la energía usada en la retirada de solventes
ajustando el ratio de ventilación de acuerdo con las fluctuaciones en las
concentraciones de vapor. El equipo continuamente rastrea la tasa de extracción
del disolvente en tiempo real y controla la tasa del aire de ventilación basada
en necesidades reales, por lo tanto manteniendo un ratio seguro en todo el
proceso. El equipo de monitoreo LFL puede emplear varias tecnologías,
incluyendo sistemas catalíticos, sensores infrarrojos, sistemas de ionización y
sensores de combustión. El equipo de monitoreo LFL tiene funciones de
auto-control y usa un gas de ensayo calibrado para la auto-calibración. Debido
a que el proceso de vaporización depende del aire de entrada y salida, la
conexión del controlador LFL a un variador de velocidad ajustable en el
ventilador del sistema de escape puede mejorar la eficiencia del proceso
incluso más allá (también puede usarse un ajuste con trampilla).
Ejemplo
Los ratios
de ventilación de seguridad son significativamente más bajos cuando se usa un
equipo de monitoreo LFL respecto a cuando tales equipos están ausentes. Esto
disminuye los requerimientos de energía para el proceso porque es necesario
evacuar menos aire para mantener menos aire inflamable. Para un proceso de
revestimiento en franjas continuo requiriendo 46 galones de xylol con una
temperatura máxima del horno de 800 ºF y temperatura ambiente de 70 ºF, el
ratio de ventilación de seguridad es 4:1 sin equipo de monitoreo LFL. Esto da
como resultado unos requerimientos de gas de escape de 8.330 pies cúbicos por
minuto y consumo energético de 6,7 MMBtu por hora. Con un coste de $8/MMBtu
asumiendo operaciones en dos turnos, este proceso cuesta aproximadamente
$214.000 al año. Instalando un equipo de monitoreo LFL se reduciría el ratio a
2:1, la mitad de los requerimientos de energía. El ahorro anual sería $107.000.
Con un coste instalado de $12.500 para un controlador LFL, se obtiene un
payback tan atractivo como de 1,5 meses.
Bibliografía:
·
Use
Lower Flammable Limit Monitoring Equipment to Improve Process Oven Efficiency.
Process Heating Tip Sheet 11 – October 2007. Industrial Technologies
Program. U.S. Department of Energy
·
Hans
L. Melgaard, “Substantial Energy Savings are Often Realized by Monitoring
Process Oven Exhausts,” Plant Engineering, November 1980
·
Improving
Process Heating System Performance: A Sourcebook for Industry. U.S. Department
of Energy and Industrial Heating Equipment Association.
Palabras clave: heat recovery technologies, Lower
flamable limits (LFL)
Excelente articulo y gracias por el aporte, si te interesa te invito a que veas mas sobre hornos industriales y equipos termicos en www.hornosindustrialesaingetherm.cl
ResponderEliminarHola, muchas gracias.
ResponderEliminarEstamos trabajando en procesos térmicos en Bolivia, Perú y Chile. Es interesante tener vuestro contacto en la zona.