Según informa la compañía Ashtead Technology, se viene observando una creciente demanda de cámaras de imágenes térmicas para la industria de inspección de edificios, y el motivo es el ahorro en costes asociado con la eficiencia energética. En particular los equipos de imágenes térmicas FLIR que comercializa la compañía ofrece instrumentación para identificar pérdidas de calor como consecuencia de pobre aislamiento y pérdidas de aire excesivas. Estos equipos pueden usarse también para llevar a cabo mantenimiento predictivo de sistemas eléctricos y estructurales y para detectar pérdidas en tuberías y daños escondidos por agua. No obstante, conviene indicar que esta información se refiere al Reino Unido, un país bastante sensibilizado con la importancia de las inspecciones. En España, la información que tenemos es que el uso de la termografía de infrarrojos no es todo lo aceptado por las empresas como a primera vista pudiera parecer.
Dos cámaras que presentan características apropiadas para la inspección por sus características avanzadas son FLIR B360Y y P620.
Ambas cámaras ofrecen una sensibilidad térmica de 0,06 ºC, capacidad de fusión imagen a imagen y SD Card recording. Pero al comprar una cámara infrarroja debemos analizar bien previamente cual va a ser su uso. En este ejemplo, la B360 ha sido diseñada específicamente para la inspección de edificios, y por ello cuenta con alarmas de punto de punto de rocío para resaltar los problemas. La cámara P620 tiene unas especificaciones más altas con un sensor infrarrojo más grande de 640x480, display LCD de 14 cm y capacidad para registrar tanto imágenes térmicas de video como rígidas.
Trabajando con el último software de ThermaCAM, se crean rápidamente informes que se integran en programas basados en Windows.
Más información aquí
0 comentarios:
Publicar un comentario